Otro dato muy positivo es que la estancia media de las personas que nos visitan ha crecido un 7% respecto a 2019 y que, durante el verano y el otoño, se han registrado cifras récord  de pernoctaciones.
 
Por otra parte, los hoteles son la modalidad más afectada por la pandemia, que aloja a más viajeros (6 de cada 10) y que, por ello, más le está costando la recuperación, registrando un 34% menos de pernoctaciones que en 2019. Sin embargo, en el mes de agosto se registraron cifras record de ocupación, por encima del 70%.
 
Respecto al Camino de Santiago, aun quedando todavía muy por debajo (un 60,4%) de los datos registrados en 2019, se han más que doblado los de 2020, con un 127,8% de aumento en el número de peregrinos y peregrinas.
 
En cuanto a las consultas de visitantes atendidas en las oficinas de turismo, las 248.354 atenciones realizadas suponen un aumento del 78,7% respecto a 2020, a pesar de ser un 44,6% menos que las de antes de la pandemia.
 
Con respecto a los recursos turísticos visitables, el Palacio Real de Olite sigue siendo el recurso con más visitas, 173.357, seguido por las cuevas de Zugarramurdi con 132.700, que supera las cifras registradas en 2019, al igual que la Selva de Irati.
 
Y para finalizar con este adelanto de los datos del informe del Observatorio Turístico de Navarra, el número de afiliaciones a la Seguridad Social en el sector ha aumentado un 8,9% respecto a 2020 y se queda a un 8,3% de las de 2019, contabilizándose 17.147 personas trabajando.