“Lo sostenible es una cuestión de empeño y compromiso, por encima de la moda”

¿Cuándo os lanzáis a desarrollar esta empresa?

Agroturismo Maricruz surge hace 21 años, acompañados de 6 gallinas, una gata y muchas ganas. Queríamos cambiar de vida, apareció esta casa y decidimos dar el salto al medio rural, donde ya han nacido nuestros txikis y también donde, desde el principio, tuvimos la idea de compartir nuestras inquietudes, acerca de aprender a vivir en este entorno de naturaleza impresionante sin hacerle daño, como dice nuestra web: “es un sueño de una familia de neorurales que quiere vivir en contacto con la naturaleza de una manera sana y ecológica”.

¿Qué significa en el día a día para vosotros la sostenibilidad?

La sostenibilidad, antes se hablaba de autosuficiencia, es un trayecto de aprendizaje, un camino para crear un mundo mejor, una forma de vida pareja al entorno y ese es nuestro reto, recibir a la gente y compartirlo, sin herirlo.

Un día a día de agroturismo sostenible son casetas, animales, huerta, casas con biomasa, en realidad es un continuo aprendizaje en el que nos ha ayudado mucho Ecotur, una iniciativa de turismo ecológico, que crea la marca, pero sobre todo nos ayuda a formarnos en todo lo relacionado con la alimentación ecológica, recuperación de razas autóctonas, de semillas para productos locales, la calefacción, los materiales de construcción, …siempre buscando la autosuficiencia energética, un camino largo y costoso, que nos hace pensar que, en el fondo, lo sostenible es también una cuestión de empeño y compromiso, por encima de la moda. En este trayecto es muy importante este acompañamiento y en ese sentido nos gustaría señalar a Kañoetxea, que son líderes en aprovechamiento energético y bioconstrucción.

¿Cómo lo aplicáis en vuestro proyecto? ¿Cómo es un día sostenible?

Nuestra oferta turística comienza con un desayuno con productos locales y ecológicos; a continuación, realizamos una visita pedagógica a la granja, donde damos de comer a los animales y hablamos de ellos, y a la huerta, utilizando unas carpetas que hemos ido creando para enseñar lo que hacemos (recogida frutas, verduras, plantas aromáticas) y, luego, nosotros ya nos dedicamos a la limpieza de las casas, que hemos conseguido que también sean totalmente productos ecológicos, a poner los fuegos para calentar las 2 casas rurales, con biomasa, y ahora ya con placas solares que vamos aprendiendo a utilizar.

Además de los desayunos, servimos cenas ecológicas con nuestros productos, y el resto es contacto con la naturaleza en un lugar espectacular como este, en las faldas del Pirineo.